Glosofobia

 

Al igual que las demás fobias tratadas con anterioridad esta también está dentro de los trastornos de ansiedad, y se caracteriza por el miedo irracional y persistente a hablar en público. De igual forma se le conoce como fobia a hablar en público o miedo escénico. Las personas que sufren de glosofobia experimentan una intensa ansiedad y temor ante la idea de tener que comunicarse verbalmente con un grupo de personas. Pueden evitar eventos en los que sean el centro de atención o experimentar síntomas físicos como náuseas o sensación de pánico en estas circunstancias..

Este tipo de fobia puede tener un impacto significativo en la vida de una persona, limitando su participación en actividades laborales, académicas o sociales que requieran hablar en público.

Es importante tener en cuenta que, el nerviosismo antes de hablar en público es algo normal que muchas personas experimentan, pero en el caso de la glosofobia, la ansiedad es tan elevada que puede impedir llevar a cabo la actividad y bloquear mentalmente a la persona, incluso llegar a desmayarse en algunos casos.

Síntomas de la glosofobia

Los síntomas de la glosofobia pueden variar de una persona a otra, y no todas las personas experimentan todos los síntomas. Algunos de los síntomas físicos más comunes incluyen:

-Incremento de la respiración.

-Palpitaciones y/o taquicardias.

-Sensación de ahogo.

-Aumento de la tensión muscular.

-Aumento de la sudoración.

-Desmayos.

-Boca seca.

-Dolores de estómago.

-Dolor de cabeza.

-Náuseas, mareos y vómitos.

-Temblores.

-Tartamudeo.

Además de los síntomas físicos, la glosofobia también puede manifestarse a través de síntomas cognitivos, como pensamientos recurrentes y creencias irracionales sobre lo que podría suceder al hablar en público. Estos pensamientos pueden aumentar la ansiedad.

Es importante destacar que la glosofobia puede limitar la vida de una persona, tanto a nivel laboral como personal. Sin embargo, existen tratamientos eficaces para superar esta fobia. 

Tratamientos eficaces para tratar la glosofobia

Uno de los enfoques más comunes es la terapia cognitivo-conductual, que implica trabajar con un terapeuta para abordar los pensamientos negativos y los patrones de comportamiento asociados con el miedo a hablar en público. Algunas técnicas utilizadas en esta terapia incluyen la exposición gradual a situaciones de hablar en público, la desensibilización sistemática y la reestructuración cognitiva..

Además de la terapia, también se pueden utilizar otros enfoques para tratar la glosofobia. Algunas personas encuentran útil practicar técnicas de relajación, como la respiración profunda o la meditación, para reducir la ansiedad antes de hablar en público. También se ha utilizado la realidad virtual como una herramienta para simular situaciones de hablar en público y ayudar a las personas a enfrentar su miedo de manera controlada.

En algunos casos, se pueden recetar medicamentos para controlar los síntomas físicos de la ansiedad asociados con la glosofobia, como los betabloqueantes o los antidepresivos. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los medicamentos deben ser recetados y supervisados ​​por un profesional de la salud mental (específicamente un psiquiatra).